Donde el aire es transformado en sonido al pasar por las cuerdas vocales. Está conformado por la laringe y por los músculos que forman las cuerdas vocales o pliegue vocal.

1-.LA LARINGE

Es una estructura cartilaginosa en forma de anillo móvil, que gracias a una acción muscular, se desplaza según las exigencias de sus funciones respiratorias o fonatorias. Su misión primordial es proteger a los órganos respiratorios inferiores de los cuerpos extraños y producir la voz. Este productor de sonido esta compuesto por un esqueleto cartilaginoso, parcialmente calcificado en el adulto, por músculos y por una mucosa que los reviste. La laringe corona la tráquea en su parte superior, así como un capitel corona una columna, detrás y por encima de ella está la faringe. Situada en el interior del cuello, da lugar a una protuberancia denominada comúnmente “manzana de Adán” que se conforma por el cartílago tiroides, el más grande de la laringe. Su forma es la de un embudo, cuya parte más estrecha, adaptada a la tráquea, es ocluida por las cuerdas vocales cuando éstas se tienden en la vibración. La entrada de la laringe puede cerrarse mediante la epiglotis, cartílago sujeto a la parte posterior de la lengua, cuya función es cerrar la entrada de la laringe durante la deglución para impedir el paso de los alimentos hacia las vías respiratorias.

2-.LAS CUERDAS VOCALES

Fijadas a la laringe, en su borde interno, se encuentran las cuerdas vocales, las cuales no son otra cosa que formaciones musculares y de capas de revestimiento que vibran al paso del aire, el cual regulan gracias a la acción de músculos abductores, aductores y tensores. Estos últimos dos son los que intervienen en la fonación, y de su acción conjunta depende la entonación. Los aductores acercan las cuerdas vocales y cierran la glotis en la fonación y los tensores tienden las cuerdas vocales según la altura del sonido. La cuerda vocal se forma por un músculo intrínseco, el músculo vocal o tiroaritenoideo (músculo aductor y tensor) y puede ser entendida como el extremo final de éste, lo que algunos autores denominan “vocal fold” o ligamentos vocales, y se vale para las necesidades de entonación de un músculo extrínseco, el músculo cricotiroideo (músculo tensor). La dirección de las cuerdas es la de un triángulo con el vértice hacia dentro y adelante, y delimitan un espacio llamado glotis, que es el comprendido entre los dos bordes del pliegue vocal, que se abre en la inspiración, pero se cierra en la fonación lo suficiente para dejar pasar sólo el aire que necesita la vibración exigida por el sonido que se quiere emitir.